Quito.- (EFE).- Los padres del experto informático sueco Ola Bini, detenido por las autoridades de Ecuador en relación a una presunta red de espionaje vinculada a Julian Assange, denunciaron este martes que hubo irregularidades en la detención de su hijo y que este siempre estuvo «del lado correcto».
En una comparecencia de prensa en un hotel de la capital tras llegar en la víspera a Ecuador, el padre del detenido, Dag Gustafsson, y su madre, Görel Bini Gustafsson, con semblante serio, leyeron un comunicado en el que advirtieron de su preocupación ante lo que consideraron «irregularidades en su detención».
Y aseguraron que su hijo es una persona «honesta y considerada», que siempre «ha estado del lado correcto».
El Ministerio del Interior de Ecuador, en coordinación con la Policía, ordenó la detención de Bini en el Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre de Quito el pasado jueves -día en que se le retiró el asilo a Assange en la Embajada ecuatoriana en Londres-, cuando se disponía a viajar a Japón.
La Fiscalía General de Ecuador informó el sábado que se presentaron cargos contra el informático sueco de 36 años, por su presunta participación en un delito de ataque a la integridad de sistemas informáticos del país.
Las autoridades ecuatorianas han apuntado además a la vinculación que mantenía Bini con el fundador de WikiLeaks, lo que habría motivado su detención con fines de investigación.
La autoridad judicial responsable del caso dispuso prisión preventiva durante 90 días y la inmovilización de las cuentas bancarias del procesado.
Tras hablar con los abogados que llevan el caso, los progenitores del informático sueco indicaron: «Nos enteramos de varias y severas irregularidades en su detención que no fue conducida correctamente, lo que nos preocupa como padres».
Pidieron a las autoridades en Ecuador su inmediata liberación, porque afirman estar «seguros de que es inocente de lo que se le ha acusado».
«Lo único que sabemos es que Ola es amigo de Julian Assange, nada más», afirmó el progenitor antes de aclarar que su hijo tenía programado desde hace meses su viaje a Japón para pasar unas vacaciones y practicar un arte marcial del que es adepto.
El abogado de Bini, Carlos Soria, explicó que la detención de su defendido fue «ilegal» porque se produjeron numerosas irregularidades en el proceso, entre ellas, que estuvo incomunicado durante ocho horas, que no contó con asistencia letrada, ni se puso en conocimiento de la Embajada de Suecia en Quito el arresto hasta el día siguiente.
