Quito.- Elizabeth Cabezas Guerrero aseguró que presidir la Primera Función del Estado, durante el periodo más complejo de la política nacional, ha sido una oportunidad histórica. Pues su presidencia inició en un momento de ruptura, conflicto y división. Etapa que a su parecer está superada, pues se ha “logrado manejar esos conflictos con responsabilidad”, expresó en varios diálogos con periodistas en Guayaquil. Se han aprobado 23 leyes en consenso la mayoría, aun cuando en el Parlamento ya no hay una fuerza política predominante.
Recordó que al inicio de su gestión, en 2018, planteó a los jefes de bancada priorizar la labor parlamentaria en función de los ecuatorianos, por lo que desarrolló una agenda legislativa priorizada, que enrumbó su labor parlamentaria. Al momento, cree que es indispensable conversar para tener claridad y preguntarse para qué presidir la Asamblea, cuál ese nuevo rumbo que plantean, cuál es la agenda de la que todos hablan.
Para la Presidenta, el rumbo del Legislativo está marcado. Su gestión ha sido positiva, pues hubo acciones contundentes en fiscalización y control político, se calificaron seis solicitudes de juicio político y se censuró a dos ex altos funcionarios, solo en un año.
Planteó los talleres para entregar el Acuerdo Nacional por la Gobernabilidad, el documento fue un trabajo conjunto entre 250 actores: representantes de gremios, organizaciones, funcionarios y académicos para impulsar el desarrollo productivo, atraer inversión extranjera, dinamizar el mercado laboral, garantizar una educación de calidad, fortalecer el control de la delincuencia y el crimen organizado.
Respecto de la labor en transparencia, reconocida por ubicar al Parlamento ecuatoriano entre las cinco primeras naciones -según la Red Latinoamericana de Transparencia Legislativa- se entregó 3000 solicitudes de información como mecanismos de rendición de cuentas. Además, se han realizado 40 comparecencias mensuales -en promedio- de funcionarios públicos y autoridades a las comisiones del Parlamento.
La lucha contra la corrupción en este periodo es imparable, aseguró, muestra de ello es el proyecto de Ley de Recuperación de Capitales, impulsado por la Titular del Parlamento, socializada incluso en organismos internacionales con la finalidad de luchar contra la corrupción y destinar esos recursos a la labor social.
Su mayor logro ha sido establecer el diálogo pluripartidista. Sin imposiciones de una mayoría absoluta. Pues, los resultados demuestran que a pesar de los severos conflictos hay una respuesta de gobernabilidad y estabilidad al país. Destacó que ella es la primera opción de su bloque legislativo para ocupar nuevamente la Presidencia. Asimismo, dijo que la dirección debe conducir hacia una agenda nacional que priorice leyes en bien de los ecuatorianos como se hizo durante este periodo.
Quizás su mayor desilusión es haber confiado en que todas las fuerzas políticas tienen los mismos objetivos nacionales.
